Hemos tenido oportunidad de disfrutar recientemente de un viaje a Miami con este Boeing 767 - 200 con capacidad para transportar 175 pasajeros, en una configuración de 157 asientos en Clase Económica y 18 asientos en su denominada Primera Clase o Sharko Class. Luego de un placentero vuelo desde Asunción a Santa Cruz en el Tape Aviru, y una breve estadía en el salón VIP del aeropuerto, embarcamos en el Sharko para el tramo a Miami. La bienvenida, a cargo del amable y eficiente personal de a bordo, se complementa con la entrega de mantas y almohadas y una copa de champagne. La atención es personalizada y de alta calidad durante todo el vuelo pues el bien entrenado personal está atento a los más mínimos requerimientos de los pasajeros. El Sharko ofrece una exclusiva manera de volar con un excelente nivel de confort y un servicio único.  El menú gourmet ofrece delicias gastronómicas internacionales. El servicio básico incluye ensaladas de vegetales asados con queso parmesano, pechuga de pollo o tornedo de lomito o salmón, a elección del pasajero; tartas de quesos y uvas, frutas frescas, pan y masas dulces y un delicioso sandwich complementado con una variedad de bebidas en un open bar durante todo el vuelo. También una variada y selecta biblioteca se encuentra a disposición de todos los pasajeros, así como el tradicional amenity kit, con pantuflas y necessaire. Los asientos cama son ideales para llegar descansados a destino y unos controles ubicados en el apoya brazos permiten regular la altura de los espaldares, extender el soporte para los pies y utilizar un ajuste lumbar electrónico. Quienes regresan desde Miami, pueden igualmente utilizar la sala VIP Américas, de ese aeropuerto antes de subir a bordo. El Sharko ofrece además una franquicia de equipaje de 2 piezas de 32 kilos cada una  y un equipaje de mano de hasta 18 kilos. Por último, la clase Sharko ofrece precios promocionales en esta temporada. ¿Qué más puede  pedirse para un viaje único?