El desierto, en su versión peruana, ha despertado el interés de los pilotos y organizadores del Dakar. Impresionados por el esplendor y las exigencias técnicas que el inmenso mar de arena les ofrece han decidido que en esta ocasión, el punto de salida del rally en su versión 2013, será Perú. El evento culminará en Santiago de Chile.  Durante los miles de kilómetros que integran el recorrido, los pilotos se alejarán del Océano Pacífico para adentrarse en tierras argentinas. Al otro lado de la Cordillera de los Andes, la variedad de terrenos pondrá a prueba la capacidad de adaptación de unos y otros.

En cuanto al  impacto que el Rally tendrá en la economía Peruana, se estima que unos US$ 600 millones se activarán durante la competencia, según un informe del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo, Mincetur. “Es un gran logro del Mincetur que se ratifique que el Dakar se iniciará en Lima, el 5 de enero de ese año. Es una oportunidad que tenemos que aprovechar al máximo, porque será muy beneficioso para el turismo en el país”, declaró el Carlos Canales, presidente de la Cámara Nacional del Turismo de Perú,  Canatur.

El titular de Canatur, detalló que las empresas de turismo receptivo obtendrían alrededor de USD 400 millones por la cantidad de visitantes extranjeros previstos en época de la competencia mientras que en turismo interno se alcanzaría la suma de USD 200 millones. Además, en el turismo receptivo se generarían USD 250 millones, a través de los cien mil turistas extranjeros que llegarían al país. Los otros USD 150 millones se obtendrían con los viajes de los visitantes extranjeros a los destinos turísticos más emblemáticos del país, como son Machu Picchu o la Amazonía.