Con la correspondiente anticipación, operadores mayoristas y agencias de viajes locales solicitaron a la APF las entradas para el mencionado juego, elemento imprescindible para la elaboración de los paquetes turísticos, aéreos y terrestres, que harían posible a la afición paraguaya presenciar el importante encuentro deportivo.

A las respuestas evasivas del inicio -por parte de los funcionarios de la APF encargados de confirmar y garantizar las entradas- sucedió una etapa en la que se hizo prácticamente imposible dar con los mismos. Ante esta situación, Asatur a través de una conferencia de prensa aclaró a la opinión pública lo que estaba ocurriendo e informó la cancelación de numerosos paquetes turísticos que significaron un daño económico de aproximadamente 2.5 millones de dólares al sector.

En forma insólita, la APF señala ahora que las entradas fueron rechazadas por los operadores turísticos sin aclarar que estas fueron puestas a disposición de los mismos a menos de una semana del juego, circunstancia que hacía imposible organizar, promocionar y comercializar paquetes turísticos. Ojalá a futuro las autoridades de la APF tomen los recaudos necesarios a efectos evitar inconvenientes de este tipo.