Un comunicado de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo, pone en evidencia la mentira del presidente Nicolás Maduro quien en marzo se había comprometido al inicio de las transferencias de los ingresos captados en concepto de ventas de boletos aéreos por compañías internacionales. Estos ingresos se encuentran retenidos por el gobierno de Venezuela en abierta violación a tratados internacionales. IATA también reclama el aumento excesivo de las tasas aeroportuarias y la aplicación arbitraria de impuestos poniendo en peligro la conectividad aérea del país.
 
Por su parte, la Asociación Venezolana de Agencias de Viajes y Turismo emitió un comunicado denunciando la “difícil situación vigente, consecuencia de la limitaciones a la venta de boletos aéreos”. Para las agencias de viajes del país, la venta de boletos aéreos representan alrededor del 80% de sus ingresos y la actual situación pone en riesgo la continuidad de las mismas.
 
Muchas agencias se han visto obligadas a reducir su plantel de funcionarios o simplemente cancelar sus operaciones. “La situación afecta igualmente a quienes se están formando en las diferentes universidades e institutos de enseñanza en el área de turismo, pues al egresar, no encontrarán opciones de empleo” señala el comunicado.
 
La situación alcanzó tales proporciones que hasta el mismo Skal Internacional, una institución mundial de profesionales de turismo, pidió al gobierno de Venezuela que cumpla con sus obligaciones financieras con las empresas aéreas que todavía operan en el país, a fin de proteger la existencia de más de 2.000 agencias de viajes, y el medio de vida de sus trabajadores.