Fueron necesarios 2 años y 30 millones de dólares para la renovación del  piso. La experiencia al vacío se completa con paredes también transparentes. Desde allí, los turistas pueden apreciar París en todo su esplendor. Este nuevo proyecto busca un mayor disfrute de la torre y de París de forma totalmente respetuosa con el monumento y su historia.
 
La prensa parisina destaca el éxito del emprendimiento. Los visitantes hacen largas filas para acceder al lugar, disfrutar la experiencia y de la privilegiada vista que ofrece, y tomarse selfies.
 
Dentro de su estructura de hierro, se registra un incesante flujo ascendente y descendente, ya que la Torre Eiffel es un gigantesco mirador al que acuden anualmente unos 7 millones de turistas del mundo entero para contemplar París a sus pies. Administrar ese flujo interminable de gente es uno de los objetivos de la renovación de la primera planta, sostuvieron los responsables de la Sociedad de Explotación de la Torre Eiffel (Sete).
 
La renovación también supone un ahorro de energía ya que produce gran parte de sus necesidades energéticas: por medio de unos paneles solares se calentará parte del suministro de agua del edificio y se utilizará tecnología LED en todas las zonas.
 
Construida por Gustave Eiffel, la torre fue terminada en 1889 como parte de una Exposición Universal para celebrar el centenario de la Revolución Francesa. La torre mide 312 metros de alto y durante más de 40 años ostentó el puesto de edificio más alto del mundo.