Los perros se encuentran en las diferentes terminales del aeropuerto y fueron entrenados en el Programa de Terapia Asistida por Animales (TAA) por la Sociedad de San Francisco para la Prevención de la Crueldad contra los Animales.



Uno de estos perros se llama Poquito, fue rescatado en México y pertenece parcialmente a la raza Bichón Habanero. “Él está enamorado de la pelota y se enfoca en ella como un perro de pastoreo lo haría. También se emociona cuando escucha que va al aeropuerto a trabajar”, explica la descripción de los canes integrantes de la brigada de la página oficial del aeropuerto internacional de San Francisco.
 
Cada animal fue cuidadosamente seleccionado por su temperamento y su capacidad de adaptación al aeropuerto, ya que cada perro usa un chaleco que dice “Acaríciame”, por lo que conviven constantemente con humanos. El aeropuerto internacional de San Francisco está,en general, preparado con diferentes comodidades más para las personas que se encuentren estresadas por los viajes en vacaciones, ya que es el primero en contar con un área para practicar yoga.
 
Numerosos estudios han comprobado los beneficios de simplemente acariciar a un animal y también a los perros, ya que al jugar con ellos se libera la oxitocina también llamada la molécula del amor. Esta hormona se asocia con el placer y ayuda a disminuir los niveles del estrés por lo que en general también sirve para erradicar la depresión.