En su primera Asamblea General de carácter extraordinario, la OMT, tras un breve debate acordó la suspensión por amplia mayoría de votos. La decisión tiene carácter inmediato  y aunque la delegación rusa  anunció su retiro antes del debate, el retiro voluntario solo es efectivo un año después de una comunicación oficial a través de los canales apropiados.

El Secretario General de la OMT, Zurab Pololikashvili, mencionó: “Los miembros de la OMT han enviado un mensaje claro: el turismo es un pilar de la paz y la amistad internacional, y los miembros de la OMT deben defender estos valores o enfrentar las consecuencias, sin excepciones. Esta Asamblea General de emergencia demuestra que las acciones de Rusia son indefendibles y contrarias a los principios mismos de la OMT y de la gobernanza internacional”.

Con efecto inmediato, la Federación de Rusia no podrá ejercer los derechos ni disfrutar de los privilegios de ser miembro de la OMT. Esto significa que no podrá recibir servicios de la Organización, incluida la asistencia técnica, ni la Federación de Rusia podrá participar en ninguna reunión o evento de la OMT, ni podrá presentar candidatos para formar parte de los órganos estatutarios de la OMT, ni votar en las elecciones a los órganos de la OMT o proponer un candidato para ocupar el cargo de Secretario General.

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Los Estatutos de la OMT establecen que cualquier Estado miembro puede ser suspendido si dos tercios de sus compañeros miembros creen que persiste en una política contraria al objetivo fundamental de la Organización. Se requiere una mayoría de dos tercios de los miembros plenos presentes y votantes en la Asamblea General para que se apruebe una moción de suspensión de membresía. La suspensión es temporal y puede ser cancelada, sólo por la Asamblea General y siguiendo el mismo procedimiento.