"Un hotel no es un edificio en una playa o montaña, es un estado de ánimo al que se llega a través de una experiencia única". Con esta idea nació 700.000 horas, el primer hotel itinerante del mundo, que cambia de lugar cada seis meses para descubrir los espacios más increíbles a su exigente clientela.

El nombre (700.000 horas) señala el tiempo medio que cada ser humano permanece en la tierra. “El tiempo que pasamos en la Tierra es demasiado precioso para simplemente dejarlo pasar. Por eso hemos creado 700.000 heures, una experiencia de viaje como ninguna otra. Nuestro objetivo es lograr que las horas que pases con nosotros se conviertan en tus recuerdos más inolvidables”, explica Teyssier.

Los destinos se eligen y se comienzan a trabajar con tres años de antelación. Generalmente se seleccionan dos por año, y en algunos casos tres. Islandia, Irán, Colombia, Nepal, las islas de San Blas en Panamá, son los lugares a los que apunta llegar el equipo en los próximos años.

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Thierry Teyssier se va moviendo de locación en locación. Junto con él, se desplazan en cada mudanza 100 baúles, creados a medida, que cuentan todo lo necesario para la estadía y que también funcionan como decoración. “Cuando regresás a un lugar que te gustó, estás feliz de volver a estar en la misma habitación, recordás todos los detalles de tu última estadía. Con 700.000 Heures, eso es imposible. Necesitaba encontrar una manera de hacer que el huésped se sienta de vuelta con nosotros. ¿Y qué podría simbolizar mejor el arte de viajar que los baúles?”, dijo en una entrevista años atrás.

700.000 Heures se instala en edificios de cuatro o cinco habitaciones de manera temporal en diferentes partes del mundo. Con la ayuda de artesanos locales, el creador le da la sofisticación de un alojamiento de lujo y el lugar queda listo para recibir turistas.

Este revolucionario y exclusivo hotel, sin embargo, no es para cualquiera. Solo pueden disfrutar de sus instalaciones los miembros del club El círculo de los Amazirs. Para eso, hay que abonar una cuota de 2.500 euros, más otra anual de 500 euros, que se descontarán de los viajes que se hagan.