Este año, los trenes Shinkansen, acaban de cumplir 60 años desde su primera puesta en marcha y han vuelo a batir un nuevo hito histórico en un viaje de prueba desarrollando unos 500 kilómetros por hora sin conductor en la cabina utilizando levitación magnética.

A diferencia del ferrocarril convencional, esta  tecnología permite a los trenes levitar magnéticamente deslizándose en el aire a lo largo de una vía utilizando un campo magnético. El tren se eleva hasta 10 centímetros por encima de los railes, eliminando el contacto y con el aire como único elemento de fricción permitiendo que el tren gane más impulso.

La prueba realizada, forma parte del proyecto para desarrollar una nueva línea que a partir de 2034, unirá Tokio y Nagoya, con un 90% de tramos a través de túneles y pasos subterráneos en 40 minutos, en lugar de los 100 actuales. Inicialmente, estaba prevista la inauguración de la ruta en 2027,  pero, tras varios retrasos burocráticos y económicos, finalmente la fecha prevista será dentro de diez años.

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