El edificio de 16.000 m², más grande que 30 canchas de baloncesto, alberga más de 250.000 objetos, 350.000 libros y 1.000 archivos. Convertido en una nueva atraccion, tanto para locales como para visitantes extranjeros, recorrer su enorme sala de colecciones de tres plantas es como descubrir tesoros por todas partes.

El V&A es el museo nacional de diseño, artes escénicas y aplicadas de Gran Bretaña, y su almacén alberga pasillos tras pasillos de estantes abiertos llenos de todo tipo de objetos, desde antiguos zapatos egipcios hasta cerámica romana, antiguas esculturas indias, armaduras japonesas, muebles modernistas, un scooter Piaggio y un bote de basura pintado de colores brillantes del Festival de Glastonbury. Se tardó más de un año y 379 camiones para trasladar los objetos desde el antiguo almacén del museo en el oeste de Londres hasta la nueva sede.

El edificio inaugurado a finales de mayo pasado ofrece un concepto nuevo en museos ya que los visitantes pueden reservar y manipular determinados objetos, con la excepción de materiales que pueden ser peligrosos,  “encargando un objeto” con el propósito de tener una interacción personal y más cercana con lo que desean ver en detalle.

Para leer las principales noticias turísticas de la semana, suscribite a nuestro newsletter de los viernes.

El museo insignia del V&A, ubicado en el distrito londinense de South Kensington, fundado en la década de 1850, es una de las mayores atracciones turísticas de Gran Bretaña. The Storehouse se encuentra al otro lado de la ciudad, en el Parque Olímpico, una zona del este de Londres.

El edificio tiene espacio para exhibir objetos demasiado grandes que no podían ser exhibidos antes, como una columnata mogol del siglo XVII de la India, una oficina modernista de los años 30 diseñada por Frank Lloyd Wright y un telón de escenario diseñado por Pablo Picasso para un ballet de 1924, de unos 10 metros de altura. También a escala monumental se encuentran grandes trozos de históricos edificios desaparecidos.

Otro de los objetivos del Storehouse es exponer el funcionamiento interno del museo mediante exhibiciones que profundizan todos los aspectos del trabajo del personal de mantenimiento, desde la eterna batalla contra los insectos hasta el sistema de numeración de los contenidos del museo, y una galería de observación para ver al personal trabajando.  “En promedio, los museos tienen entre el uno y el cinco por ciento de sus colecciones en exhibición”, señalan directivos del nuevo espacio. “Esta colección es propiedad de todos y todos deben tener acceso a la misma. Ese es nuestro principio fundamental”.