La nueva aerolínea de bandera italiana se denominará Alitalia TAI (Trasporto Aéreo Italiano) y tendrá un presupuesto de 3.000 millones de euros, aprobado por el Gobierno italiano a principios de mayo, y una flota de 100 aviones.

“Tenemos prisa por relanzar la aerolínea nacional”, señaló el primer ministro italiano Giuseppe Conte en Facebook, en tanto que la ministra de Transporte de Italia, Paola De Micheli señaló que “una nueva era está comenzando”.

A partir de ahora, Alitalia TAI se centrará en el plan industrial, que deberá presentarse a la Comisión Europea. Dado que Alitalia, a diferencia de otras operadoras europeas, ya estaba en crisis antes de la pandemia de COVID-19 y, de hecho, bajo administración extraordinaria de un tribunal, el elemento clave para evaluar es la “discontinuidad” requerida por la Comisión Europea. Es decir, el capital estatal solo será autorizado si la nueva compañía no es una extensión de la anterior. La compañía también tendrá que ajustarse a pautas gubernamentales que implican el seguimiento de una estrategia fiel y de accesible gestión, orientada a la autosuficiencia ante el desafío post-covid-19. Se espera que la aerolínea pueda llegar a mantener entre cuatro y cinco mil de sus empleos.

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Alitalia TAI reinicio sus operaciones este mes de julio y además de su red regular de destinos agregó nuevas rutas domésticas semanales, uniendo Roma y Milán con cinco ciudades. En los mercados internacionales, su nuevo programa incluye vuelos a otros destinos en Europa, África del Norte y Oriente Próximo. Fundamentalmente operará conexiones desde Roma a Atenas, Ámsterdam, Tel Aviv, Túnez, Niza, Boston, Malta y Tirana; y desde Milán a Londres, París, Ámsterdam y Bruselas.