Mediante un comunicado, el Gobierno argentino señaló que ArBus, cuya operación estaba a cargo de Intercargo, generaba gastos mensuales por un valor de USD 200.000; mientras que la recaudación era de tan solo USD 125.000.

"Durante esta gestión se minimizaron costos, tanto indirectos como directos, y se aumentaron los ingresos. A pesar de los avances no se logró un punto de equilibrio y la demanda no superó ocupaciones del 20%, de 35 asientos, se ocupaban en promedio solo 7", informó la cartera de estado presidida por Guillermo Dietrich.

En cuanto a la demanda general, esta era muy baja debido a que “solo el 3% de las personas que llegan al aeropuerto lo hacen a través de este servicio”. De ese 3%, solo un 25% de las personas apelaba a ArBus, pese a que ofrecía precios más bajos que otras empresas.

ArBus era un servicio de transporte terrestre que funcionaba los 365 días del año entre las 6:00 y las 0:00, con una espera máxima de 30 minutos y tarifas accesibles que permitían viajar desde Aeroparque a Ezeiza y viceversa, y que conectaba con otros puntos de la capital argentina.