Bajo la autorización de la firma Virgin Galactic, del multimillonario británico Richard Branson, la agencia brasileña de turismo espacial, Marcos Pontes, actualmente ofrece la posibilidad de reservar boletos por un costo de USD 250.000 por persona. La agencia, que es propiedad del primer astronauta brasileño en ir al espacio, Marcos Pontes, está posicionada como la quinta en ventas entre las empresas globales autorizadas por Virgin Galactic.

Según representantes de la empresa, los vuelos serán realizados a bordo de la nave espacial Unity, la cual está siendo sometida a una última fase de pruebas consistente en superar los 100 kilómetros de altura y regresar con seguridad al suelo. En caso de lograrse resultados positivos, la nave espacial deberá será homologada en 2019 para iniciar los vuelos con pasajeros en 2020.

"Con el fin de las pruebas, ya solo se dependerá de la certificación de la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos para que los vuelos espaciales sean abiertos para su comercialización. De aquí en adelante, este mercado enorme debe ganar fuerza, con varias empresas invirtiendo en ello", dijo Marcos Pontes.

Con capacidad para seis pasajeros y dos pilotos, el vuelo espacial se realizará en dos fases. En la primera, una nave nodriza llevará a los viajeros espaciales hasta una altitud de 15 kilómetros. En ese momento, un cohete acoplado en la parte inferior de la aeronave será liberado y pasará a volar por su cuenta hasta sobrepasar los 100 kilómetros por encima de la atmósfera terrestre, alcanzando la gravedad cero. Tras un determinado tiempo la nave planeará nuevamente hacia la Tierra y realizará el aterrizaje de pista convencional.