Otro dato positivo señala que los fallecimientos igualmente han disminuido en un ocho por ciento, algo que ocurre por primera vez desde principios de enero. La única región que experimentó un aumento de casos fue el Pacifico Occidental con un incremento del 29%. El número de muertes también aumento en el Pacifico Occidental y África mientras disminuyó en el resto del mundo. El mayor número de nuevos casos de COVID-19 se registró en Rusia, Alemania, Brasil, Estados Unidos y Corea del Sur.

La OMS destaca que ómicron sigue siendo la variante abrumadoramente dominante en todo el mundo, y representa más del 99% de las secuencias compartidas con la base de datos de virus más grande del mundo. La OMS también informó que "la vacunación de refuerzo mejora sustancialmente la efectividad contra la variante ómicron, pero dijo que aún se necesitan más detalles sobre cuánto dura dicha protección”

Sin embargo, aunque las cifras decrecientes fueron ciertamente buenas noticias, el informe semanal sobre pandemias de la agencia de salud de la ONU indicó que todavía hubo más de 12 millones de nuevas infecciones por coronavirus la semana pasada y alrededor de 67,000 nuevas muertes por COVID-19 en todo el mundo.

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