Las nuevas prendas fueron creadas por el diseñador de moda y sastre británico Ozwald Boateng en una tarea desarrollada en los últimos cuatro años seleccionando telas, el concepto y las diferentes piezas que componen los uniformes.
Los hombres lucirán un traje a medida de tres piezas con pantalones de corte normal y Slim fit. Las mujeres por su parte, lucirán vestidos, falda y pantalón. Por primera vez, la compañía incluye un jumpsuit, además de la opción de túnica y hijab.
“Nuestro uniforme es una representación icónica de nuestra marca, algo que nos llevará hacia el futuro, representando lo mejor de la Gran Bretaña moderna y ayudándonos a ofrecer un gran servicio original británico a nuestros clientes. Desde el principio, todo ha girado en torno a nuestra gente. Queríamos crear una colección de uniformes que nuestra gente se sintiera orgullosa de llevar y, con la ayuda de más de 1.500 compañeros, estamos seguros de haberlo conseguido”, dijo Sean Doyle, presidente y CEO de British Airways.
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Alineada a un tema clave para la industria en la actualidad, más del 90% de las nuevas prendas se fabrican con tejidos sostenibles procedentes de mezclas de poliéster reciclado, mientras que solo se eligieron proveedores que formen parte de la iniciativa «Better Cotton» (Mejor Algodón), la cual promueve prácticas sostenibles en las comunidades algodoneras alrededor del mundo.
Según detallaron desde British Airways, los técnicos de mantenimiento y los operadores de rampa serán los primeros en utilizar los nuevos uniformes a partir de la próxima primavera boreal, mientras que las tripulaciones y los agentes de tráfico lo estrenarán durante el verano.
Los antiguos uniformes, serán donados a entidades de caridad o reciclados para crear juguetes y otros elementos.
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