La demanda aérea alcanza niveles sin precedentes en el mundo, impulsada por China, India, Brasil y México. El sector de la aviación comercial celebra ganancias crecientes, pese a desafíos en costos, logística y clima. En 2026 se espera otro récord. Los datos, publicados por la plataforma especializada OAG, confirman que el tráfico global crecerá un 4% respecto al 2025 probablemente superando los 5.200 millones de pasajeros, impulsado por un notable repunte en mercados emergentes como China, India, Brasil y México.

Brasil encabeza el repunte regional en Latinoamérica, con un crecimiento sostenido en vuelos domésticos y conexiones internacionales hacia Estados Unidos y Europa. México y Chile también muestran signos de recuperación total, mientras que Argentina empieza a recuperar su conectividad previa a la pandemia, especialmente en rutas hacia Brasil, España y los Estados Unidos.

Las proyecciones de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) estiman que 5.200 millones de pasajeros volarán durante 2026 (en 2024 fueron 4.770 millones y en 2025 unos 4.980 millones), reafirmando la completa recuperación del sector tras el impacto del Covid-19. En paralelo, los beneficios globales de las aerolíneas crecerán de U$S 39.500 millones en 2025 a U$S 41.000 millones el próximo año, según la misma organización. 

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Sólo en Argentina, en 2024 se transportaron unos 29,3 millones de pasajeros (domésticos e internacionales), nuevo récord para el país según la ANAC.​ En 2025, en los once primeros meses, se contabilizan 43,0 millones de pasajeros, un 13% más que en el mismo período de 2024.

En Uruguay las cifras también fueron alentadoras desde enero de 2025 cuando el aeropuerto de Carrasco movió 206.544 pasajeros, récord histórico mensual, un 2,6% más que enero de 2024. Con un crecimiento interanual de entre 7% y 8% y más del 12% en movimiento de aeronaves  todo apunta a un tráfico en el 2025 en el orden de 2,5 a 3 millones de pasajeros, un aumento record. En Paraguay el crecimiento es más discreto pero este año también es muy posible que el aeropuerto de Asunción termine con un movimiento récord cercano al millón de pasajeros.

Para América del Sur, el desafío será sostener este impulso en 2026, con aerolíneas regionales que buscan ampliar flota y capitalizar la demanda creciente. Si las tendencias actuales se mantienen, el próximo año podría consolidar el regreso definitivo del turismo y los viajes corporativos al ritmo pre-pandemia.