El mismo fenómeno ocurre con las posadas turísticas, manejadas en gran parte por mujeres emprendedoras. En cuanto a formación académica, también las mujeres son mayoría en nuestro país en prácticamente todas las carreras vinculadas a la actividad turística.


A diferencia de lo que ocurre localmente, tanto a nivel público como privado (tenemos una Ministra de Turismo y sus principales colaboradores son en su mayoría del sexo femenino, por otra parte, hoteles, mayoristas de turismo, agencias de viajes y compañías aéreas tienen mucha participación femenina en puestos ejecutivos), a nivel mundial, en algunos países, la presencia de mujeres se nota más en labores de menor remuneración y especialización, preferentemente en posiciones de atención primaria al cliente, gestiones internas, limpieza, auxiliares de cocina y otros.


Para el empoderamiento de la mujer, el turismo es un motor importante donde se reducen las diferencias de salario y de oportunidades laborales. Como generador de riqueza y empleo, la actividad turística en todos sus segmentos ofrece a las mujeres el doble de oportunidades que cualquier otro sector, al tiempo de generar espacios donde las decisiones son tomadas mayoritariamente por ellas.


En el Día Internacional de la Mujer, destacamos el liderazgo y capacidad profesional de las mismas, aptitudes desarrolladas sin descuidar su rol de esposas y madres. A ellas, nuestro merecido homenaje y deseos de un feliz día.