"No sabemos qué pasará en el futuro", expresó el gobernador de Florida, Ron DeSantis, "Pero creo que es un paso importante para fomentar el trabajo de las personas en las empresas, las escuelas y la libertad personal", agregó.

El nuevo dictamen incluye la suspensión de las medidas existentes contra el coronavirus aprobadas por los gobiernos locales, como los mandatos obligatorios de la utilización de mascarillas. DeSantis citó el avance de la vacunación como una de las justificaciones de la medida. El estado tiene alrededor de 23 millones de habitantes, de los cuales 9 millones han recibido al menos una dosis de la vacuna.