Los empleados de primera línea, incluidos los tripulantes de cabina, los pilotos y los trabajadores del aeropuerto, deberán estar completamente vacunados antes del 15 de noviembre de 2021 y el resto de los empleados antes del 31 de marzo de 2022. Estarán exceptuados quienes no puedan vacunarse por razones médicas documentadas.

“Tener una fuerza laboral completamente vacunada protegerá a nuestra gente contra el virus, pero también protegerá a nuestros clientes y las comunidades a las que volamos”, ha explicado el director ejecutivo de Qantas, Alan Joyce agregando que el 89% de los funcionarios de la compañía ya se encuentra vacunado.

La aerolínea llevará en las próximas semanas conversaciones con los empleados, sus representantes de salud y seguridad y los sindicatos durante sobre los detalles de la política, incluida la forma en que se aplicarán las exenciones médicas.

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Qantas se suma de esta manera a otras líneas aéreas que obligan a sus empleados a vacunarse mientras que el gobierno australiano deja a discreción de las empresas la decisión de obligar a sus empleados a vacunarse, aunque apoya la decisión de la línea aérea.

Las fronteras en Australia se mantienen cerradas desde marzo de 2020 y se espera la reapertura cuando el 80% de la población se encuentre vacunada.