En los últimos años, la compañía ha mostrado un creciente interés en ofrecer una experiencia única a sus clientes de Clase Business optimizando sus servicios y alineándolos a las necesidades de los mismos.
Singapore Airlines ha desarrollado una estrategia enfocada en consolidar su posicionamiento como una de las aerolíneas más comprometidas con los estándares de calidad, acondicionando sus aviones a servicios, productos y facilidades que satisfagan las expectativas de sus clientes.
Con una configuración de asientos 1-2-1, la cabina de Clase Business prioriza la comodidad de los pasajeros con asientos ergonómicos con una anchura de 71 cm, elaborados con cuero escocés y cosidos a mano por Poltrona Frau, en el caso de los modelos de los A380. Además, y con tan solo un botón, estos asientos se pueden convertir en una cama de 2 metros, quedando totalmente horizontal para asegurar el descanso a lo largo del vuelo.
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Por otro lado, en los modelos A350 y 777, los asientos de la Clase Business ofrecen dos posiciones más que destacan por su confort: la Lazy Z, capaz de equilibrar el peso del usuario cuando está sentado; y la Sundeck, que permite estirar las piernas favoreciendo, así, un descanso total.
Además, cada asiento dispone de tomas de corriente, diversas zonas de almacenamiento y una gran pantalla full HD. Un monitor con pantalla táctil de 18 pulgadas concentra más de 1.000 opciones de entretenimiento que incluyen juegos, música y juegos, series y programas de televisión, así como las últimas películas de estreno en alta definición.
Espacio para trabajar, auriculares que anulan el ruido exterior y una red WiFi optima y segura permiten continuar con las tareas laborales durante el vuelo, mientras que la oferta gastronómica de la Clase Business presenta una amplia variedad de platos, esencias, gustos y matices que pueden ser reservadas hasta 24 horas previas al vuelo a través del servicio “Book the Cook”. La posibilidad de facturar hasta 40 kilos de equipaje, accesos a las renovadas salas VIP del aeropuerto de Changi, en Seúl, prioridad en el check in y embarque complementan la experiencia.
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