El aeropuerto empezó a verse afectado por las lluvias el viernes 3 de mayo, cuando la pista se inundó obligando a la suspensión de aterrizajes y despegues y a la cancelación de vuelos.
En cumplimiento de la legislación vigente, el aeropuerto emitió un comunicado anunciando el cese de sus operaciones por tiempo indeterminado ya que no hay previsiones de reanudar la actividad. Una NOTAM o “Notice to Airman”, un documento reconocido internacionalmente destinado a divulgar cambios y restricciones temporales que pueden tener un impacto en las operaciones aéreas con fecha de finalización el 30 de mayo expresa: "Este aviso se dirige a empresas e instituciones relacionadas con la aviación y puede alterarse en cualquier momento; aclaramos que no hay previsión de retomar las operaciones".
El aeropuerto de Porto Alegre opera principalmente vuelos domésticos, pero también internacionales, debido a su posición estratégica en el sur de Brasil, con conexiones a las capitales de los países vecinos.
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De momento, se está usando la base militar de la ciudad de Canoas como alternativa para los vuelos de mercancías, aunque las autoridades locales advirtieron que el cierre del aeropuerto principal también aumenta el riesgo de desabastecimiento.
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