El último vuelo de la compañía, llegará a Republica Checa el 28 de octubre desde París marcando el fin de la larga trayectoria de Czech Airlines que, en los últimos años, se ha enfrentado numerosos desafíos, entre ellos las consecuencias de los ataques del 11 de septiembre, el crecimiento de las aerolíneas de bajo costo y el impacto de la pandemia de COVID-19. La flota actual de la compañía está formada por tan solo dos Airbus A320-200, que pasarán a formar parte de la flota de Smartwings.
En 2021, Czech Airlines (CSA), se declaró insolvente y solicitó su reorganización en el Tribunal Municipal de Praga, de acuerdo con la Ley de Insolvencia del país. En junio del año pasado, reanudó sus vuelos entre Madrid y Praga. Fuentes del sector apuntan asimismo la mala gestión interna, como erróneas decisiones de inversión y gastos excesivos, como factores que contribuyeron a su caída.
Smartwings gestionará las reservas realizadas previamente con Czech Airlines y la marca seguirá apareciendo en algunos aviones durante un tiempo limitado. Sin embargo, a partir del 27 de octubre, el código de vuelo "OK" desaparecerá de todos los billetes de avión y de las tarjetas de embarque.
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Smartwings es una aerolínea de bajo coste con sede en la República Checa. Fundada en 2004, ha crecido hasta convertirse en la primera aerolínea del país. Cubre vuelos nacionales e internacionales y cubre más de 80 destinos en Europa, Oriente Medio, el norte de África y Asia. Es una filial del grupo Travel Service, que también opera vuelos chárter bajo la marca Travel Service.
Si bien su sede se encuentra en Praga, Smartwings también tiene bases operativas en Eslovaquia, Polonia, Hungría y otros países. Su flota está compuesta principalmente por aviones Boeing 737.
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