La crisis energética se ha profundizado en los últimos meses en la isla debido a la escasez de combustible, desastres naturales y las obsoletas plantas, con tecnología de varias décadas de antigüedad.

El apagón  tuvo su punto crítico el miércoles a la madrugada cuando sólo se veían luces en un puñado de grandes hoteles y edificios gubernamentales en el horizonte de la ciudad.

Aun cuando la energía eléctrica volvió a varias partes de Cuba, autoridades de la isla informaron que el suministro se mantiene muy por debajo de la demanda, un hecho que indica que gran franja de la isla sigue sin electricidad.

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La mayoría de los residentes de Cuba sufren apagones rotativos de horas de duración a diario, incluso con la red funcionando a plena capacidad. Los apagones, junto con la escasez de alimentos, medicamentos y agua, han complicado enormemente la vida en la isla afectando la calidad de vida de sus habitantes.

Con relación a la actividad y servicios turísticos, el Ministerio de Turismo de Cuba en un comunicado señala su capacidad y voluntad en garantizar la calidad y continuidad normal de los servicios turísticos ante la situación energética actual del país, destacando que la mayoría de las propiedades hoteleras y extra hoteleras están equipadas con generadores de respaldo para asegurar un suministro eléctrico continuo y confiable.

Además destinos como Cayo Largo, Cayo Santa María, Cayo Coco, Cayo Cruz y Cayo Paredón generan su propia electricidad, independiente al sistema eléctrico nacional, precisa la publicación. Igualmente, se adoptan prácticas de ahorro y eficiencia energética para minimizar el impacto en las operaciones y en la experiencia de los clientes.