Erigido en la región de las misiones jesuíticas de Bolivia, en la ciudad oriental de San Ignacio de Velasco, el nuevo aeropuerto internacional fue inaugurado esta semana por el presidente boliviano Evo Morales, con el objetivo de incrementar el flujo turístico hacia la zona. La terminal aérea está situada en una región declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco debido a que alberga a las misiones jesuíticas mejor conservadas del continente americano.

“La zona donde se encuentra el aeropuerto, la Chiquitanía, cuenta con una buena imagen a nivel internacional que Bolivia debe aprovechar. Ahora estamos inaugurando los vuelos diurnos, pero a final de año el aeropuerto estará bien iluminado para prestar un servicio de 24 horas", señaló en su discurso Evo Morales.

Datos proporcionados por el Ministerio de Culturas y Turismo de Bolivia, indican que la construcción del aeropuerto demandó una inversión de USD 28,6 millones y estuvo a cargo de la firma española Contratas Iglesia. Su pista de 2.750 metros de longitud y 45 de ancho, el aeropuerto prevé atender las operaciones de aerolíneas como la estatal Boliviana de Aviación (Boa) y la privada Amaszonas.

Actualmente, el municipio de San Ignacio de Velasco cuenta con una población de aproximadamente 60.500 habitantes y una capacidad hotelera para atender a 700 huéspedes por noche. Su flujo turístico proviene principalmente de otras ciudades de Bolivia así como de Alemania, Argentina, España, Suecia, Rusia y Perú.