Ya se realizaron las primeras pruebas en el bote eléctrico de forma ovalada y blanca, semejante a una pequeña capsula espacial en un recorrido que permitió apreciar históricos monumentos de la capital gala.

La pequeña embarcación puede acomodar a cuatro personas y en caso de implementarse como servicio público podrá ser solicitado en una aplicación al igual que se solicitan taxis convencionales, bicicletas compartidas y otros servicios.

Con el nombre de Seabubbles, sus creadores afirman que ayudarán a descongestionar el tráfico, no producirán ruido, olas ni contaminarán. Los vehículos no solo ofrecerán una forma divertida de transporte, tambien brindarán ventajas económicas pues tendrán un mínimo costo de combustible. En síntesis, serán un nuevo modelo en el cambiante escenario de la movilidad urbana.