En el decreto,  firmado por el presidente Alberto Fernández establece la suspensión temporal de los vuelos y dice que la medida afectará a todos los vuelos internacionales de pasajeros desde las áreas afectadas durante el período de 30 días. Los viajeros que no cumplan con las medidas para combatir el virus estarán sujetos a multas.

La ciudad de Buenos Aires también ha decidido suspender todas las actividades turísticas y eventos públicos que pueden reunir a más de 200 personas.