Además de permitir la reanudación de los vuelos con salida de Brasil, que habían estado suspendidos durante diez días, el gobierno francés también anunció una nueva política de entrada o conexión al país con el objetivo de contener la propagación del virus COVID-19 en su territorio.

Los pasajeros que tengan a  Francia como destino final deben presentar una prueba de PCR negativa realizada hasta 36 horas antes de la salida o prueba de PCR negativa realizada hasta 72 horas antes de la salida + prueba de antígeno realizada no más de 24 horas antes de la salida.

Además, los pasajeros deben realizar otra prueba de antígeno a su llegada a París y permanecer en cuarentena durante 10 días. Esto se aplica a cualquier destino en Francia. De acuerdo con las medidas impuestas por el gobierno local, solo se autorizan los viajes imprescindibles para el país. Para ello, el pasajero debe justificar su viaje aportando comprobante y dirección, así como un certificado de viaje y declaración sanitaria que se puede descargar de la página web del Ministerio del Interior de Francia.

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Para los clientes que se conectan a otro destinos, igual deben presentar una prueba de PCR negativa realizada hasta 36 horas antes de la salida o una prueba de PCR negativa realizada hasta 72 horas antes del embarque + una prueba de antígeno realizado no más de 24 horas antes del embarque.