Mantener el distanciamiento social, ventilar los espacios cerrados, realizar desinfecciones diarias son algunas de las recomendaciones para tener la mejor experiencia a bordo. Entre los requisitos establecidos para el turismo de cruceros se menciona la presentación de una declaración de salud o PCR previo al embarque y el correspondiente control de temperatura. Quienes ya se encuentren en el buque están exentos del PCR exigido solo a las personas que aborden el buque en territorio argentino; registros de síntomas para todas las personas que suban al buque; días de aislamiento previo al embarque. Las personas que provienen del extranjero deberán respetar las medidas sanitarias vigentes al momento de la reactivación de la actividad para turistas extranjeros.
También será necesario presentar para el embarque un certificado de vacunación del 100% (huéspedes, personal, tripulación) con esquema completo y cumplimiento al menos 21 días antes del inicio del viaje. Las vacunas aceptadas son todas las vacunas aprobadas por la OMS, y/o aprobadas en el país de origen y/o aprobadas en la Argentina, las cuales deberán acreditarse con sus respectivos certificados oficiales. Las personas que no cumplan este requisito no podrán subir a bordo. Como todavía se encuentra pendiente la aprobación de la aplicación de vacunas a menores de 12 años, las autoridades sanitarias podrán evaluar su aceptación en cruceros de acuerdo a los resultados de la aplicación de los protocolos en la actividad, a la situación epidemiológica de dicho momento y a la aprobación de las vacunas para esta franja etaria.
Todos los pasajeros deberán contar con seguro por Covid-19 y seguro por fallecimiento, que incluya aislamiento, traslado, internación y en caso necesario, repatriación. Además, deberá contemplar la posibilidad de cobertura de la suspensión del viaje.
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Con el objetivo de lograr una reapertura controlada ante el coronavirus se exigirá a las empresas de cruceros la presentación de la declaración jurada de salud de los pasajeros una declaración de sanidad marítima, un certificado de control o de exención de sanidad a bordo, libro médico, la capacidad máxima ante la necesidad de aislar o internar a pasajeros y flexibilidad para cambios de fechas y reprogramación de operaciones según la situación epidemiológica en lugar de partida y destinos.
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