Los expertos de la industria dicen que la eliminación de la limpieza diaria, que ganó fuerza durante la pandemia, tiene que ver con la preferencia de los huéspedes, pero muchos dicen que en realidad tiene que ver con la intención de disminuir costos en los hoteles al reducir el número de housekeeping contratadas.

Desde Unite Here, un sindicato en los Estados Unidos que representa a las trabajadoras de hoteles señala que la tendencia apunta a generar más ingreso a los propietarios de los hoteles al imponer mayor carga de trabajo al eliminar puestos de limpieza.

Si bien tiempo atrás algunos hoteles ya habían comenzado a experimentar con una limpieza menos frecuente en nombre de la sostenibilidad, la tendencia se generalizó mucho más a principios de la pandemia, cuando para promover el distanciamiento social y otros protocolos de seguridad, muchos hoteles cambiaron a ofrecer limpieza de habitaciones solo si un huésped lo solicitaba y, a veces, sólo después un cierto número de días. En ese momento se pedía a los huéspedes que dejaran la basura afuera de su puerta y llamaran a la recepción para pedir toallas limpias. Pero en este momento, cuando las restricciones se eliminan y la demanda aumenta muchos hoteles mantienen estas nuevas políticas de limpieza.

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Ejecutivos de la American Hotel & Lodging Association,  cuyos miembros incluyen marcas de hoteles, propietarios y empresas de administración, señalaron que fueron las demandas de los huéspedes, no las ganancias del hotel, las que guiaron las decisiones sobre los servicios de ama de llaves durante la pandemia. “Muchos huéspedes, hasta el día de hoy, no quieren que la gente entre en su habitación durante su estadía. Obligar a un huésped a hacer algo que no quiere es la antítesis de lo que significa trabajar en la industria hotelera”, señalan.

Pero las políticas de limpieza varían según el tipo de hotel, y los hoteles de lujo tienden a proporcionar limpieza diaria a menos que los huéspedes no lo quieran. Los trabajadores hoteleros sindicalizados señalan que rechazar la limpieza diaria de las habitaciones perjudica a las housekeeping y amenaza los empleos, además que las habitaciones que se dejan sin limpiar durante cierto tiempo se vuelven más difíciles de dejar impecables al momento del ingreso de los pasajeros.