Tras realizar una revisión de sus perspectivas para el presente año, la Organización Mundial del Turismo (OMT) vaticina una disminución en el número de turistas internacionales; y por ende, en los ingresos del sector. En este sentido, prevé una reducción de entre el 1% y 3% en la cantidad de turistas internacionales, lo cual significaría una pérdida de hasta 50.000 millones de dólares para la industria.

“La incidencia del brote del COVID-19 (Coronavirus) se hará notar en toda la cadena de valor del turismo. En esta primera evaluación se espera que Asia-Pacífico sea la región más afectada, con una caída prevista de las llegadas de entre el 9% y el 12%. En la actualidad, las estimaciones para otras regiones del mundo son prematuras, habida cuenta de la rapidez con que evoluciona la situación”, asegura parte de un comunicado difundido por la OMT.

Ante esta situación, la OMT insta a gobiernos, organizaciones internacionales y organismos donantes a que incluyan al turismo como prioridad dentro de sus planes y medidas de recuperación, dado que el apoyo tanto político como financiero será “fundamental para garantizar que el turismo pueda liderar una recuperación económica y social de mayor alcance, como se ha demostrado en situaciones pasadas, debido al carácter altamente resiliente del sector y a su capacidad de recuperarse con fuerza”, concluye la OMT.

Más allá de las nuevas perspectivas, el organismo internacional pide cautela ante cualquier estimación considerando que existe posibilidad de una nueva actualización. Asimismo, asegura que seguirá colaborando estrechamente con la Organización Mundial de la Salud (OMS) para aplicar las medidas necesarias que permitan reducir toda disrupción innecesaria para los viajes y el comercio.