Detallar sus consecuencias y todo lo ocurrido a partir de marzo del 2020 seria redundancia por lo que intentaremos sintetizar todo lo ocurrido en pocas palabras: colapso económico; derrumbe del mundo de los viajes y de toda la infraestructura turística con; hoteles cerrados, operaciones aéreas canceladas, líneas de cruceros con operaciones suspendidas, agencias de viajes en riesgo de quiebra procesando más cancelaciones que reservas y miles de desempleados.

Graficando todo esto, en un intento de evitar la propagación del virus, en un momento dado se encontraban cerradas prácticamente el 100% de las fronteras en el mundo por lo que pretender enumerar todo lo malo que ocurrió en estos meses sería equivalente a presentar un calendario de calamidades que preferiríamos olvidar o no haber vivido jamás.

Las capacitaciones, conferencias y reuniones virtuales, los vuelos de repatriación y sanitarios (que dieron un respiro económico a las aerolíneas involucradas), los vuelos “burbuja” precursores de la reactivación regular de operaciones aéreas, los hoteles salud, la aparición de nuevas asociaciones como la de Guías de Turismo y APOAT, fueron señales de resiliencia en el contexto de la actividad turística y marcaron el regreso a una nueva normalidad. Las agencias de viajes y sus dos principales asociaciones, ASATUR y AAVIP en un trabajo conjunto, en múltiples escenarios demostraron que en situaciones adversas “la unión hace la fuerza”. También la Secretaria Nacional de Turismo, en una política plena de puertas abiertas, acompañó al sector privado en la medida de sus posibilidades en todas las gestiones y estrategias orientadas a la reactivación del turismo.

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En este complejo escenario, lamentablemente también surgieron propuestas poco oportunas para el momento actual que afectan al devastado sector de las agencias de viajes. No parece una buena idea ni una adecuada política de gestión generar nuevos conflictos en momentos de crisis. Afortunadamente una mesa de trabajo conjunto pautada en una reunión realizada el día de ayer en la sede de Senatur, permitirá un dialogo más fluido entre las partes involucradas y esperamos devuelva el relacionamiento a sus cauces normales.

Culminamos el año con el anuncio de las primeras vacunas para COVID 19 que ya se empezaron a administrar en algunos países brindando una pequeña luz de esperanza para el retorno a la normalidad aunque las muertes en todo el mundo siguen alcanzando nuevos niveles diariamente. En nuestro país, anuncios recientes mencionan la posibilidad de que también contemos con las mismas a inicios del nuevo año.

Nuestra editorial también se ha visto afectada por el momento actual al punto de haber tenido que descontinuar momentáneamente las publicaciones impresas. Sin embargo, hemos estado más conectados que nunca con el trade informando y manteniendo la línea objetiva e imparcial que nos caracteriza, a través de nuestros medios digitales y nuestro portal de noticias.

Terminemos el año intentando dejar atrás este 2020 que no pudo ser peor y pongamos juntos todo nuestro esfuerzo para que el nuevo año sea de renacimiento y crecimiento.

Sin ironías ¡FELICES FIESTAS!