De acuerdo a la nueva reglamentación, desde este lunes sólo podrán ingresar a la Argentina por vía aérea un máximo de 600 pasajeros diarios. Además, las personas que  regresen a la Argentina entre el 1° de julio y el 31 de agosto, están obligados a aislarse en los lugares que determinen los gobiernos provinciales y la Ciudad de Buenos Aires durante 10 días.

Al mismo tiempo se anunció que las fronteras continuarán cerradas para los extranjeros no residentes, y los vuelos suspendidos desde Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, Chile, Brasil, India y Turquía.

Peter Cerdá, Vicepresidente Regional de IATA para las Américas, solicitó con urgencia una reunión al Gobierno argentino, y expresó con respecto a la nueva medida, “Como industria, hemos hecho todo lo posible para garantizar una conectividad segura del país, a pesar de las drásticas restricciones operativas que ya existen. Sin embargo, la nueva reducción de 70% en el número de pasajeros internacionales que puedan llegar diariamente al país, obligará a las aerolíneas a dejar en el extranjero a miles de pasajeros, principalmente ciudadanos y residentes argentinos, sin que ellos tengan la culpa”.

Para leer las principales noticias turísticas de la semana, suscribite a nuestro newsletter de los viernes.