Las restricciones continúran hasta al menos el 3 de agosto. La restricción define que los vuelos desde ambos países hacia España deben ser ocupados íntegramente por ciudadanos y residentes españoles, o pasajeros en tránsito internacional hacia un país fuera del espacio Schengen, con escala inferior a 24 horas, sin salir de la zona del aeropuerto español.

También se prevén otras exenciones para operaciones gubernamentales, vuelos con escalas en territorio español con fines no comerciales y cuyo destino final sea otro país, carga exclusiva y vuelos humanitarios, médicos o de emergencia.

No obstante, en función de la evolución de la pandemia y de las decisiones que puedan adoptarse de forma coordinada en la Unión Europea, el Ministerio de Sanidad de España podrá levantar la medida.

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