En consecuencia, los días se Semana Santa serán para quedarse en casa ya que solo están autorizados desplazamientos mínimos destinados a la compra de medicamentos o alimentos. Todo el comercio quedará paralizado en el periodo de tiempo establecido por el decreto y entre las excepciones contempladas se mencionan solo aquellas esenciales de las entidades estatales, los servicios de salud públicos y privados, la asistencia a personas con discapacidad o con enfermedades, y los comercios necesarios como supermercados, despensas y farmacias. Como ya es común en disposiciones del gobierno, existen muchas contradicciones y situaciones inexplicables como la limitación de los servicios gastronómicos solo vía delivery, o el cierre de espacios abiertos como Ñu Guazú, cuando están permitidos los oficios religiosos aunque condicionados a la participación máxima de 20 personas.

Se garantiza el transporte para las actividades necesarias, mientras se suspenden los viajes de corta, mediana y larga distancia con el consiguiente cierre de la terminal de buses. Sin embargo, los alojamientos en hoteles, con reservas confirmadas antes de la fecha de emisión del decreto, están permitidos pero no se permitirá la realización de eventos en los mismos. Los viajes internacionales estarán permitidos y el aeropuerto Silvio Pettirossi estará operativo en estos días pero el número de viajeros ha disminuido sensiblemente esta semana.

Si por un lado, se paraliza la actividad comercial que funciona aplicando el protocolo sanitario y se restringe la movilidad interna para el ciudadano común, no resultará coherente que las autoridades permitan o ignoren las reuniones privadas, sin tapabocas, ni distanciamiento social, algo muy frecuente en estos días, pues de nada sirven las medidas restrictivas sin la correspondiente responsabilidad y conciencia social pues está demostrado que el mayor número de contagios es comunitario y el mayor riesgo de transmisión no proviene de los viajes al exterior.

Para leer las principales noticias turísticas de la semana, suscribite a nuestro newsletter de los viernes.

Para la actividad turística, importante por su aporte a la economía, las vacunas constituyen una herramienta indispensable para la reactivación de la actividad y podrían haber cambiado la cara de esta Semana Santa que nos mantendrá en casa